Esta celebración nos hace hacer un alto, no tan solo recordar a nuestra mamá o nuestras abuelas, sino también hacerlas presentes en nuestro presente, sólo hoy, sólo este momento:
Tan sólo abre la palma de tu mano, observala y acariciala cuidadosamente, ahí estan presentes nuestras madres y abuelas pues somos parte de ellas, somos ellas, no hay separación.
les comparto las manos de una abuela y madre zen; encontrando La Paz, la quietud y la dicha a través del corazón amoroso y compasivo de una abuela!!
